14 de juny 2009

Minima moralia (II)

Su libertad


Los hombres han manipulado de tal forma el concepto de libertad, que acaba en el derecho del más fuerte y más rico a quitarle al más débil y más pobre lo poco que aún tiene. El intento de cambiar algo de esto se considera una intromisión intolerable en ese dominio de la individualidad que, a consecuencia de aquella libertad, se ha desecho en una nada administrada. Pero el espíritu objetivo del lenguaje lo sabe mejor. El alemán i el inglés reservan la palabra libre para cosas y acciones que nada cuestan. Independientemente de la crítica de la economía política se da así testimonio de la no libertad que anida en la relación misma de cambio; no habrá ninguna libertad mientras cada cosa tenga su precio, y en la sociedad cosificada, sólo como tristes rudimentos de libertad existen cosas que están exceptuadas del mecanismo del precio. Pero, si se observa más detenidamente, se encuentra casi siempre que también ellas tienen su precio y son añadiduras a las mercancías o, al menos, a la dominación: los parques hacen soportables las prisiones a quienes no están dentro. Mas para los hombres de natural libre, desenvuelto, soberano y espontáneo, para aquellos que adquieren de la no libertad la libertad como un privilegio, el lenguaje dispone de un bonito nombre: el de sinvergüenza

Th.W. Adorno
Minima moralia


PD: dedicat a Jordi Marrón per tal que s'animi una mica (la seva última aportació m'ha deixat preocupat: se'ns està convertint en un pessimista?)

1 comentari:

Jordi Marron ha dit...

no sóc pessimista ni que m'hi posi.. aquest títol d'Adorno amb què ens deleites l'intel.lecte és una mica com de saga fantàstica, no et sembla?